EN EL NOMBRE DE HOY
En el nombre de hoy, dos
de marzo y dos mil
diez, martes
de sol con nubes, a las doce
-según sentencia el tiempo-
de la mañana en que doy principio
a este ejercicio en pronombre primero
del singular, indicativo,
y asimismo en el nombre del pájaro
y de la espuma del almendro,
del mundo, en fin, que habitamos,
voy a deciros lo que entiendo.
Pero antes de ir adelante
desde esta página quiero
enviar un saludo a mi madre,
que no me estará leyendo.
Para ti, que no te nombro,
amor mío -y ahora hablo en serio-,
para ti, sol de los días
y noches, maravilloso
gran premio de mi vida,
de toda la vida, qué puedo
decir, ni qué quieres que escriba
a la puerta de estos versos?
Finalmente a los amigos,
compañeros de viaje,
y sobre todo ellos
a vosotros,
Juan y Juanito, Toni
y Agustina, Felix (Patillas)
y a mi hermana Elisa,
Laura y Daniel,
a vosotros pecadores
como Jaime, que se avergüenza
de los palos que no le han dado,
señoritos de nacimiento
por mala conciencia escritores
de poesía social,
dedico también un recuerdo,
y a la afición en general.
Jaime Gil de Biedma (apropiación).
